La casa de los Otero

La casa de los Otero

Nuestra campaña Vida & Obra nos llevó hasta la casa de la familia Otero. Al llegar, tuvimos una cálida recibida por parte de Ale, quien ayuda a Mili con los quehaceres del hogar y nos abrió las puertas alegremente. Nos estaba esperando.

Comenzamos a hacer algunas fotos y al ratito se sumó Milagros, la dueña de esta hermosa casa. Ella nos compartió:

«La idea de construir nuestra casa siempre fue un sueño con Santi (su esposo). Desde que mi hermano @gvazquezcuestas se recibió de arquitecto, siempre supimos que sería el responsable de construirla. Confiamos plenamente en su criterio, desde el primer momento».

Milagros relata que, después de ahorrar con paciencia y esfuerzo durante largos años, decidieron comprar el terreno.

Gastón los llevó a conocer el barrio. Al instante se enamoraron de la idea de vivir sobre una sierra, le confirmaron su decisión y en el acto se puso manos a la obra. El hecho de conocer a la perfección a la familia, ayudó bastante a generar un proyecto de acuerdo a las necesidades de Mili y Santi.

Mily recuerda: «Nos largamos a construir con Gastón que, más allá de ser un familiar, trabajó con una calidez humana y un gran profesionalismo que hizo que la experiencia fuera indescriptible positiva».

Santi, nos compartió que lo que le gusto de Gastón, fue que tuvo la flexibilidad de efectuar cambios durante todo el proceso del proyecto y la construcción. Más allá de los miedos de Mily (por existir un vínculo familiar), su hermano superó cualquier expectativa. No solo por sus ideas innovadoras, sino también por siempre buscarle la vuelta a las cosas y a los presupuestos, sin dejar de lado la pasión con la que encara cada proyecto.

Mili y Santi disfrutando la vista desde la terraza.

Cuando Santi y Mili, nos hablan de su hogar nos dicen:

«Todos los espacios del hogar tienen su magia particular. Al estar bastante integrado todo, cada sector cumple su función, siendo la terraza ese lugar ideal para bajar decibeles y alcanzar un estado de tranquilidad y relax. La inmensidad de la vista nos proporciona paz e intimidad».

En nuestra visita, cerca de las 5 de la tarde, hubo un momento de disrupción: ¡la llegada de los niños! quienes con su alegría y su juego, son los encargados de transformar esta casa en un verdadero hogar.

«El lugar estrella de mi casa es sin duda la cocina. Buscaba un espacio integrado donde pudiera disfrutar del ruido familiar, sin quedar aislada ya que me encanta cocinar».

En el aire, constantemente se percibe un lugar descontracturado. Ese “ruido familiar” del que habla Mili, se traduce en un un sonido ambiente que inunda cada rincón de la casa.

Al imaginarnos viviendo la casa en un día de invierno, se hace imposible dejar de mencionar la estufa a leña ubicada en el living. Este, sin dudas, es “el” lugar para sobrellevar las bajas temperaturas propias de la estación.

Desde Edificor, Diego Garavano fue la persona que los atendió desde el primer momento, asesorando a Milagros y Santiago en el paso a paso. Junto a Gastón conformaron el combo perfecto para hacer las mejores compras, haciendo que la pareja se sintiera cada vez más segura a cada paso que daban.

Quienes terminan de completar esta gran familia son Paulo y Messi, sus dos adorables perros salchichas que corretean junto a los chicos aportando al clima familiero. ¡Gracias eternas por abrirnos las puertas de este hogar tan hermoso!

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