Al ingresar a su casa, una marea de hospitalidad y cercanía te invaden en un instante. Al poquito tiempo te das cuenta de que estás en el hogar de los Mainardi y te sentís como un integrante más. Quizás esto tenga que ver con el hecho de que se trata de una gran familia: 6 hijos y 4 nietos que saben hacerte sentir parte, ni bien atravesás la puerta.
Su nueva casa fue pensada, diseñada y decorada por su hijo arquitecto Ignacio. Él supo crear una obra con originalidad y criterio para que sus padres disfrutaran la mejor parte de su vida con el júbilo de mirar la más linda creación: su hermosa familia.
“El baño!!! ¡Amo mi baño!”. Fue la respuesta de Tere cuando le preguntamos cuál era su espacio favorito.
Cuando lo conocimos, entendimos el porqué; era amplio, sobrio, con los detalles justos para tener todo lo que necesitás, sin ostentar.
Nacho Mainardi, su hijo y arquitecto, fue claro y contundente en la elección de los materiales, “quería que fueran estéticamente impecables, pero con la posibilidad de que no pasaran de moda”.
Sin dudas lo cumplió ampliamente.
En la casa de Tere y Chiche, todos se ayudan; las tías buscan y reparten sobrinos por todos lados, haciendo pool con los abuelos que cocinan y esperan con ansias la llegada de algún integrante de la gran familia.Todo este dinamismo y bullicio amoroso está enmarcado por un jardín de ensueño que rodea a toda la casa, un parque increíble que, dicho por Tere, fue obra del genio de Carlos Saharrea, que además del jardín de la familia, diseñó todo el proyecto de parquización del country El Bosque.
Gracias infinitas a Rodrigo Cairella por habernos llevado a tan hermosa familia.
Seguí la historia completa de Tere y Chiche en nuestra cuenta de Instagram.
No hay comentarios hasta el momento.
Nombre *
E-mail *
Comentario *
Comentarios
No hay comentarios hasta el momento.
Dejar un comentario