¿Cómo limpiar una bacha de cocina? Guía práctica 2020
13 enero, 2020
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Tener nuestra cocina limpia y reluciente es fundamental para mantener el higiene en el ambiente, y también para estar más a gustos y contentos. Ya te contamos cómo limpiar tus porcelanatos, y hoy te traemos una guía con tips y consejos para que la bacha de tu cocina esté siempre limpia.
¿Cómo se limpia una bacha de acero inoxidable?
Las bachas de cocina están fabricadas con acero inoxidable, material que tiene una gran durabilidad y resulta muy útil para la funcionalidad de una bacha. Este tipo de acero tiene una película de cromo que la hace resistente a la oxidación y al deslustre, sin embargo por su uso diario y su exposición a distintos tipos de manchas, presenta algunas particularidades para su limpieza que es mejor conocer.
Para realizar la limpieza general sólo debés contar con agua caliente, esponja, detergente o producto específico, y un trapo seco. Primero enjuagás la superficie con agua caliente limpia, luego realizás la limpieza con la esponja con detergente, y con nueva agua limpia lo enjuagás. Es importante realizar el secado de manera inmediata para prevenir las manchas de agua. Con esta técnica general podrás limpiar tu bacha y sacar los restos de comida.
Cómo limpiar el acero inoxidable: marcas y manchas
Existen en el mercado muchos productos de limpieza para tratar manchas particulares. Siempre que utilices tu producto favorito es recomendable leer las instrucciones del mismo, y utilizar guantes para proteger tus manos de los productos químicos. Podés utilizar productos como Cif Crema, Antigrasa, o superficies delicadas. La lavandina no la utilices porque daña el material.
A la hora de la limpieza, primero limpiá la bacha con agua caliente, luego utilizando la esponja con el producto seleccionado frotá toda la bacha. Si hay rincones donde la suciedad está adherida, podés ayudarte con un cepillo de cerdas blandas. Deberás dejar actuar el producto el tiempo necesario, que figura en la etiqueta del mismo. Luego limpiá los restos del producto con un paño mojado con agua, asegurando retirar bien todo para evitar manchas. Enjuagá la bacha con agua limpia y secala con un trapo seco y limpio, preferentemente absorbente.
Este procedimiento sirve para quitar diversas manchas: restos de comida, quemaduras, manchas de agua y productos, etc. En caso de que alguna mancha persiste o esté muy adherida, podés ayudarte con una espátula de madera o plástico, teniendo siempre la superficie mojada previamente con agua caliente.
¡Nunca uses utensilios de metal! Corrés el riesgo de dañar el producto y su capa protectora.
Limpieza de acero inoxidable: pulido y protección
Una vez que hayas realizado tu limpieza, podés realizar un pulido para que tu bacha esté más brillante, a la vez que se recuperan las propiedades protectoras. Para el pulido, existen productos particulares para acero inoxidable, que podés comprar en cualquier ferretería o supermercado. No debés usar pulidores industriales porque contienen químicos que dañan el acero inoxidable de uso doméstico.
Con un paño seco y con tu producto pulidor favorito, realizá movimientos circulares y uniformes sobre toda la superficie. Debe ser un paño de microfibra y no un repasador o rejilla ya que éstos dejan pelusas.
Si no querés comprar un producto, podés utilizar aceite de oliva: colocá unas pequeñas gotas en el paño y comenzá con el pulido.
Productos de limpieza recomendados
A la gran variedad de productos de limpieza disponibles se le agregan productos caseros, que tienen la misma eficacia.
Por ejemplo, con bicarbonato de sodio podés eliminar las manchas rebeldes, realizando una pasta con muy poca agua. Colocás la pasta sobre la zona de la mancha, dejás actuar media hora y luego lo retirás con un trapo. Enjuagás la bacha, la secás ¡y listo!
Para realizar la desinfección, el vinagre es un gran aliado. Empapás la esponja en el producto y la pasás por toda la superficie, después enjuagás.
Para el pulido, una opción es la pasta de dientes. Colocá en un paño un poco del producto y realizá los movimientos circulares. Una vez finalizado con un paño recorré toda la superficie quitando la pasta dental.
Tips finales para el mantenimiento diario de tu bacha
La limpieza de la bacha es recomendable para hacer al menos una vez por semana. Sin embargo, para mantener la limpieza diaria te recomendamos que una vez que terminaste de lavar los platos enjuagá bien todos los posibles restos de jabón o detergente con agua caliente o tibia. Después con una servilleta o toalla de papel con unas gotas de vinagre repasá la superficie. Finalmente secá con un paño de fibra para que no suelte pelusas, para obtener brillo en tu bacha.
El mantenimiento diario es fundamental para que tu bacha luzca siempre limpia y brillante.